¿Puedo consumir queso si tengo diabetes tipo 2? ¡Claro que sí!

queso y diabetes

¿El queso y la diabetes tipo 2 son compatibles? Por supuesto. En primer lugar, tanto si se padece diabetes como si no, la clave para una buena nutrición está en saber consumir los productos y las cantidades más adecuadas.  

¿Por qué te ha saltado la duda? Porque uno de los mitos que persiguen al consumo de queso y a la diabetes tipo 2 es que muchas personas piensan que la lactosa – el principal azúcar de la leche– puede aumentar la glucemia (la cantidad de glucosa en sangre). Si bien, en este post queremos olvidarnos del mito y darte motivos para consumir queso sin que ningún rumor te lo impida. ¡Quédate a leer! 

Queso y diabetes tipo 2: desmontando el mito

Antes de nada debemos dejar un concepto claro: ¿Qué es la diabetes tipo 2? Las personas que padecen esta enfermedad tienen dificultades a la hora de procesar el azúcar (la glucosa) que procede de los alimentos para obtener energía. 

Cuando comemos, los hidratos de carbono se descomponen en glucosa y sube la concentración de azúcar en sangre. Cuando esto sucede el páncreas envía insulina, que no es más que una hormona que permite que el azúcar en la sangre pase a todas células de nuestro cuerpo para obtener energía.

Una persona padece diabetes tipo 2 (DT2) porque las células no responden a la insulina como deberían por lo que se produce un aumento de concentración de azúcar en sangre. 

El queso y la diabetes tipo 2: no es un mal hábito alimenticio

El queso y la diabetes tipo 2 son perfectamente compatibles tal y como hemos asegurado al principio de este post. El consumo de queso es un buen hábito alimenticio para personas con diabetes ya que, según un estudio promovido por el Centro de Investigación Biomédica en Red de Diabetes (Ciberdem) en 2019, quienes consumen productos lácteos a diario tienen menos posibilidades de padecer diabetes e hipertensión y aquellas enfermedades asociadas a estas dolencias. 

La relación consumo de queso y diabetes en el último informe de INLAC

En el informe Consumo de queso y su relación con la salud de la Organización Interprofesional Láctea (INLAC) de 2022, ponen como ejemplo distintos estudios epidemiológicos que han aportado resultados sobre la asociación del consumo de queso y el riesgo de diabetes tipo 2: 

“Más recientemente se ha llevado a cabo una revisión sistemática (Álvarez-Bueno et al., 2019) que compara el alto frente a bajo consumo de productos lácteos y la dosis-respuesta en la incidencia en DT2. Para ello incluyeron 12 meta-análisis con estudios de cohortes donde las edades de los participantes oscilaron entre 20 y 88 años, y con 4 a 30 años de seguimiento. Los estudios incluyeron entre 64.227 y 566.875 participantes y notificaron entre 4.810 y 44.474 casos de DT2. La mayoría de los estudios informaron una asociación inversa entre la incidencia de DT2 y el consumo de productos lácteos […]. La asociación de DT2 con el consumo de queso en conjunto fue moderada. Además, los análisis de dosis-respuesta mostraron que el riesgo de DT2 disminuyó en cada aumento unitario en el consumo de productos lácteos totales y productos lácteos bajos en grasa.”

Tanto de este ejemplo, como en los otros dos que expone el informe, se extrae que el consumo de queso no está asociado significativamente al riesgo de tener diabetes tipo 2. 

Quesos recomendados si padeces diabetes tipo 2

Hasta ahora te hemos ofrecido evidencias de por qué puedes consumir queso si padeces diabetes tipo 2. En la enfermedad diabética el riesgo más elevado es la obesidad, la presión arterial o el colesterol y todos estos dependen del aporte energético, la cantidad de sal y la presencia de grasas saturadas que tenga el queso que consumas. 

Como ya hemos mencionado anteriormente, no tienes que privarte de visitar el paraíso si tienes diabetes, pero sí debes tener en cuenta las proporciones que ingieres y los tipos de queso que eliges. Los ideales son aquellos que presenten los niveles más bajos de sal, de aporte energético y de grasas saturadas. Una buena porción de queso para los más curados sería de 30 gramos y de 50 y 70 gramos para los más frescos. 

¿Y cuáles serían los quesos que puedes comer sin temor a nada? Los quesos estrella que te detallamos a continuación. 

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Nuestro queso fresco de cabra se elabora artesanalmente con leche fresca de cabra florida criada en libertad por nuestros cooperativistas. Es el queso que buscas para disfrutarlo en tu ensalada, al horno con verduras o con un toque de miel. 

El queso fresco de cabra es uno de los más saludables que puedes consumir, porque te aporta vitaminas A, D y K, así como una gran variedad de vitaminas del complejo B. Además es más ligero que los quesos frescos de vaca, al tener la leche de cabra un menos contenido grasa. ¡Sabemos que va a ser imposible decir NO!

Queso fresco de cabra sin lactosa Corsevilla

¡Y aún hay más! Si padeces intolerancia a la lactosa, tenemos el queso que necesitas. Deléitate con nuestro queso fresco realizado artesanalmente con leche de cabra sin lactosa. En él se une la tradición de nuestra quesería de El Pedroso con la mejor leche procedente de cabras criadas en libertad en nuestro Parque Natural. 

Nuestro queso de cabra fresco sin lactosa se caracteriza por un sabor y aroma suave debido a su corta maduración. Es un queso de fácil digestión, por lo que si sientes pesadez al consumir queso de cabra fresco con lactosa pero no quieres renunciar a su sabor, te recomendamos que lo pruebes. ¿Te ha convencido 100%, eh? 

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Después de emplear tu tiempo en asegurarte de que puedes comer sin miedo un rico manjar como es el queso en caso de padecer diabetes, solo nos queda darte las gracias por confiar en el nuestro. Y es que en Corsevilla trabajamos por cuidar de tu bienestar desde el primer eslabón de la cadena: nuestra preciada materia prima, la que nos permite que hoy puedas probar bocado con total garantía de calidad. 

Déjate sorprender por el sabor natural de nuestros quesos de cabra.

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